• 626 90 13 80 / 639 66 80 19
  • hola@lozoyacomunicacion.com
  • Calle Arcadi García i Sanz, 10 bajo. Castelló
 
 

1. ANÁLISIS-DIAGNÓSTICO:
¿DÓNDE ESTAMOS?

El primer paso es mantener con nuestros clientes una exhaustiva entrevista inicial que nos permita adentrarnos en su situación, extrayendo toda la información relacionada con su potencial, sus puntos fuertes y débiles, antecedentes, oportunidades futuras y todo aquello que nos permita trazar con exactitud un diagnóstico de su situación actual. Un trabajo que se complementa con aquéllos estudios de mercado o análisis sociológicos que se consideren necesarios, en su caso, para determinar con la máxima precisión la situación de partida de nuestros clientes.

 
 
 
 

2. OBJETIVOS:
¿DÓNDE QUEREMOS ESTAR EN UN FUTURO?

La comunicación no es un gasto, es una inversión. Y como tal debe estar justificada. No planteamos la comunicación como un abstracto, sino como un valor añadido a nuestra marca, a nuestra empresa, un intangible que contribuye de forma decisiva a la consecución de los objetivos que se plantea nuestro cliente. Determinar estos objetivos será una parte fundamental para poder diseñar la estrategia de comunicación, parte fundamental de nuestro trabajo.

 
 
 
 

3. ESTRATEGIA DE COMUNICACIÓN:
LA COLUMNA VERTEBRAL DE NUESTRO TRABAJO

Qué comunicar, para quién, cómo y cuándo. Algo tan sencillo y a la vez tan complejo si antes no sabemos para qué queremos contarlo y a quién. El diseño de esta columna vertebral de la comunicación de nuestros clientes concentra buena parte de nuestro tiempo y es la gran aliada de una comunicación con éxito. La estrategia de comunicación reunirá el estilo, los valores, los públicos y el momento para contribuir a sumar valor a las empresas e instituciones que confíen en nosotros para afrontar con mayor garantía de éxito sus retos de futuro.

 
 
 
 

4. MEDICIÓN DE RESULTADOS:
LA EVALUACIÓN

Podemos saber si la estrategia de comunicación que estamos desarrollando es la más adecuada…y así se lo ofrecemos a nuestros clientes? Evaluar cada una de las acciones que realizamos y analizar su resultado nos ayuda a mejorar el servicio que ofrecemos a nuestros clientes, adaptando cuando sea necesario la estrategia y las acciones que implementamos, para garantizar siempre el objetivo de mejorar el resultado, prestigio y posicionamiento de nuestros clientes.